En México hay un sinfín de enfermedades que día a día son diagnosticadas en los mexicanos. Una de las más frecuentes es la insuficiencia renal.
La insuficiencia renal es un afección en la cual los riñones dejan de funcionar y no pueden eliminar los desperdicios y el agua adicional de la sangre, o mantener en equilibrio las sustancias químicas del cuerpo.
Esta enfermedad va evolucionando con el curso de muchos años, y puede ser originada por afecciones como la presión arterial alta o la diabetes, y no se puede curar.
Los casos son cada vez más frecuentes, aunque, no se diagnostican a tiempo.
Las estadísticas nos dicen que 1 de cada 10 adultos vive con una enfermedad renal crónica, aunque la cifra podría ser mayor debido a que solo estás registrados los pacientes que están en tratamiento de diálisis o hemodiálisis.
De acuerdo con Socorro Vital Flores, nefróloga del Hospital Juárez de México, la insuficiencia renal será la quinta causa de muerte en 2040.
86% de los afectados tiene antecedentes de diabetes mellitus el 34% hipertensión arterial”
De acuerdo con especialistas, es importante identificar con antelación alguna alteración o mal funcionamiento de los riñones con la finalidad de evitar la insuficiencia renal.
Es importante conocer las señales tempranas y realizar chequeos continuos con la finalidad de que te mantengas alerta y ante cualquier eventualidad acudas con tu médico.
En la etapa uno, los riñones aún funcionan bien, por lo que quizá no se presenten síntomas. En una etapa 2, los riñones pueden seguir con un buen funcionamiento, pero podría presentarse proteína en la orina.
En la etapa 3, los riñones presentan una mayor complicación para depurar los desechos y eliminar el líquido extra en sangre, podría presentarse debilidad y cansancio.
En la etapa 4, podrían presentarse síntomas como el hinchazón de manos, pies y dolor en la parte baja de la espalda. Una etapa 5, es cuando los riñones han dejado de funcionar y los síntomas se vuelven muy evidentes.
Cuando se presenta un daño renal las únicas opciones son tratamientos como diálisis, hemodiálisis o bien , un trasplante renal.
Fuente: La Jornada