La Semana Santa es una época de reflexión y convivencia, pero también puede representar un reto para quienes tienen enfermedades renales.
Los cambios en la alimentación, la falta de hidratación y la alteración de rutinas pueden afectar la salud de los pacientes en tratamiento de hemodiálisis o con insuficiencia renal.
En este artículo, te compartimos consejos clave para garantizar su bienestar durante estas fechas.
Alimentación equilibrada durante Semana Santa
Las comidas típicas de esta temporada suelen incluir pescados, mariscos y postres tradicionales que pueden ser altos en sodio, potasio y fósforo. Para cuidar la salud renal de los pacientes:
- Opta por pescados bajos en fósforo como el bacalao desalado.
- Evita mariscos y productos procesados con alto contenido de sodio.
- Reduce el consumo de postres a base de leche y frutos secos, ya que pueden elevar los niveles de potasio.
- Prioriza vegetales permitidos y ajusta las porciones de proteína según indicaciones médicas.
Hidratarse correctamente
El calor de la temporada y las actividades al aire libre pueden aumentar el riesgo de deshidratación. Es esencial:
- Beber agua en cantidades controladas, según lo recomendado por el especialista.
- Evitar refrescos, jugos envasados y bebidas con cafeína.
- Monitorear signos de retención de líquidos, como hinchazón en pies y manos.
Mantener la rutina de tratamiento
Es fundamental que los pacientes con enfermedad renal sigan su tratamiento sin interrupciones. Algunas recomendaciones incluyen:
- Planificar con anticipación las sesiones de hemodiálisis.
- No suspender medicamentos sin consulta médica.
- Informar al entorno familiar sobre la importancia de seguir la dieta y el tratamiento.
Actividad física y descanso
El equilibrio entre descanso y actividad es clave. Se recomienda:
- Realizar caminatas ligeras y evitar esfuerzos excesivos.
- Respetar las horas de sueño y evitar trasnochar demasiado.
- Practicar técnicas de relajación para reducir el estrés.
Semana Santa y salud renal pueden ir de la mano si se toman las precauciones adecuadas. Mantener una alimentación equilibrada, controlar la hidratación y seguir el tratamiento médico ayudará a que los pacientes disfruten estas fechas sin comprometer su bienestar.